Especialistas del sector público y privado reconocieron un adelantamiento en la demanda de pacientes, aunque dentro de los valores normales. Resfrío, gripe y bronquiolitis en menores de 2 años, las afecciones más frecuentes.
Al igual que en distintas partes del país, profesionales del sistema de salud señalaron que en Mar del Plata se adelantaron las consultas por la circulación de virus de invierno, aunque descartaron una saturación o colapso en las guardias.
“Se trata de una situación propia de esta época. Hay un aumento en las consultas pediátricas por infecciones respiratorias, sobre todo de la vía aérea superior: tenemos muchos casos de resfrío”, explicó a LA CAPITAL Mariano Irigoin, médico pediatra y director asociado del Hospital Interzonal Especializado Materno Infantil (Hiemi).
El especialista resaltó también que vienen registrando un aumento en los casos de bronquiolitis en menores de dos años. “Por momentos esto complica la dinámica del hospital. Son pacientes que, en guardia, requieren bastante tiempo y muchas veces necesitan internación, lo cual congestiona mucho el trabajo médico”, advirtió Irigoin.
La bronquiolitis es producida principalmente por el virus sincicial respiratorio que, por la época, hoy se encuentra en circulación.
Por otro lado, se han registrado algunos casos de influenza y Covid que “no superaron la expectativa” para este año, precisó Irigoin.
A pesar del aumento en la demanda, el pediatra descartó una saturación en las guardias, pero sí reconoció lógicas demoras.
“El número de consultas no es más de lo esperado para la época. Nosotros damos respuesta a los casos graves. Lo que pasa es que, como somos el único referente que queda en Mar del Plata -no hay otra guardia pública-, toda la población marplatense termina concurriendo al hospital. Eso hace que los casos graves se atiendan rápidamente, pero que los leves se acumulen, lo que genera una demora en la consulta. Eso estresa al sistema, no lo satura ni lo colapsa. Podemos dar respuesta”, explicó Irigoin.
De cara a un invierno que se avecina más frío de lo normal, al igual que el otoño que se está transitando, el médico anticipó que “es imprevisible lo que pueda llegar a pasar” en relación a las enfermedades respiratorias.
“Estamos siempre en alerta. Sabemos que en algunos momentos y picos de la próxima estación tendremos situaciones que nos complejizan mucho el hospital, que está sobrecargado de gente -a veces tienen que esperar 3 ó 4 horas-, que no cuenta con respuestas en otros ámbitos. Y somos un hospital con recursos humanos limitados”, planteó Irigoin.
En términos similares se pronunció María Eugenia Caggiano, coordinadora de la guardia de la Clínica Pueyrredon.
“Este año ingresamos un poco más temprano en las consultas más habituales. Cuando empiezan los fríos, comenzamos a ver infecciones de las vías aéreas inferior y superior como los casos más frecuentes”, señaló.
Caggiano indicó que en la clínica en el último tiempo se registraron consultas por infecciones de las vías áreas superiores; es decir, resfrío común y algunos síndromes gripales.
“También estamos viendo un poco más de neumonía en pacientes sanos que habitualmente no las veíamos, generalmente las encontrábamos en personas con antecedentes respiratorios patológicos. De todos modos, no son cuadros complicados”, añadió la médica.
La médica aclaró que los casos registrados están dentro de lo esperado y descartó un colapso en el sistema de atención. Las patologías respiratorias más simples, los resfríos, son la consulta más común.
La atención principal, en este contexto, está puesta principalmente sobre los adultos mayores, que suelen deshidratarse con mayor facilidad si tienen fiebre. Y con aquellas personas que cuentan con patologías previas.
“Yo siempre digo que lo que aprendimos por el Covid no lo olvidemos. Si tenemos un mínimo síntoma y no tenemos la posibilidad de hacer reposo en casa, estamos con moco nasal y estornudo, hay que usar el barbijo”, señaló Irigoin como una de los recaudos a tener en cuenta para evitar el aumento de contagios.
Además, recomendó el lavado de manos, el uso de alcohol en gel y toser o estornudar en el pliegue del codo. Y cuidar el ambiente que se habita: limpiar las superficies y ventilar. “El frío, y el consecuente encierro que genera aumentan la circulación del virus”, alertó Irigoin.
Para quienes son padres, también se sugiere que si un hijo tiene síntomas, que no concurra al colegio para evitar los contagios entre otros compañeros.
“Así nos cuidamos entre todos, porque los virus respiratorios están entre nosotros y van a seguir estando”, concluyó el médico pediatra.